Publicado en Historia Naval y de la Aviación

Santa Ana en Trafalgar (II): El Estandarte Naval Español que Luchó en la Batalla contra los Ingleses

Continuamos contando a nuestros amigos modelistas la historia de un buque de guerra fundamental en su siguiente andadura. Llega el momento del navío de línea español Santa Ana en Trafalgar, la batalla naval que enfrentó a los ibéricos contra los ingleses. La embarcación hispana parte desde la Bahía de Cádiz el 20 de Octubre de 1805 para llegar al día siguiente a Trafalgar.

Maqueta de Barco en Madera. Navío de Línea Español Santa Ana Edición Trafalgar 1805 a Escala 1/84 (22905-N) de Artesanía Latina.

¿Al mando del Santa Ana? El comandante José de Gardoqui, con la ayuda del teniente general Ignacio María de Álava y de una flota franco-española liderada por el almirante galo Pierre-Charles Villeneuve y el teniente general Federico Gravina y Nápoli al frente del navío Príncipe de Asturias. Eso sí, debe destacarse que también les acompañan otros navíos importantes. El San Juan Nepomuceno con Cosme Damián de Churruca y Elorza, el Bahamas con Dionisio de Alcalá Galiano y el Santísima Trinidad con Baltasar Hidalgo de Cisneros. Además, se les unen numerosos nobles y marinos españoles.

SANTA ANA EN TRAFALGAR: DUELO CONTRA EL ROYAL SOVEREIGN

El Santa Ana en Trafalgar mantiene un histórico duelo contra el navío británico liderado por el vicealmirante Collingwood, el relevante Royal Sovereign. Todo comienza durante la mañana del 21 de octubre 1805, momento en el que las dos flotas se posicionan para el combate. En este sentido, el almirante Pierre-Charles Villeneuve con el navío Bucentaure de 80 cañones alinea sus barcos para, en principio, eludir el enfrentamiento. Sin embargo, debe desistir de mantener el equilibrio de la paz. Dos formaciones navales en línea de los ingleses atacan por el norte y por el sur. El famoso Victory de 100 cañones con el almirante Lord Horacio Nelson en cubierta y el Royal Sovereign de otros 100 cañones con el vicealmirante Cuthbert Collingwood.

Bucentaure sufriendo el fuego del HMS Sandwich en Trafalgar. Óleo de Auguste Mayer de 1836.

¿Cuáles son los primeros objetivos de los ingleses? Uno, dividir el frente franco-español en la vanguardia y el centro. El otro, separar el centro de la retaguardia. El Santa Ana en Trafalgar se sitúa en el centro de la línea de batalla. Es entonces cuando aprecia que el Royal Sovereign se acerca por su babor, por lo que decide salirse de la formación para combatirle. Uno de los mayores enfrentamientos navales de la historia se inicia. Son los que prenden la mecha de la lucha.

No obstante, aún no se sabe a ciencia cierta en cuál de los dos buques de guerra se grita fuego antes. Según parece, lo que queda claro es que el Santa Ana en Trafalgar casi se va a pique al momento dada la furia y la precisión de los cañones ingleses. Otros barcos de la flota española se percatan de la difícil situación por la que pasa el navío de línea Santa Ana y acuden en su ayuda.

CONSECUENCIAS DEL COMBATE EN TRAFALGAR ENTRE EL SANTA ANA Y EL ROYAL SOVEREIGN

¿Consecuencias de todo ello? Enormes daños en el Royal Sovereign que casi lo hunden al ser atacado por ambos flancos, aunque poco después otros buques ingleses le echan una mano y continúa a flote. Lo remolcan con profundas dificultades hasta Gibraltar.

Santa Ana en Trafalgar. Tras la batalla, el HMS Victory abre camino y el Euryalus remolca a HMS Sovereign. Pintura de Nicholas Pocock.

Por su parte, el Santa Ana en Trafalgar queda con daños sumamente relevantes: el timón queda prácticamente inutilizado, la popa casi no existe y sus cubiertas a plena luz del día. Los británicos toman el barco, pero los españoles con el navío Rayo consiguen izar de nuevo su bandera. Dado el pésimo estado del barco, la fragata francesa Thetis lo remolca hasta Cádiz para arreglarse. Entra a dique el arsenal de La Carraca el 20 de febrero de 1806, donde se repara totalmente e, incluso, se incluye un nuevo forrado de cobre. El 9 de diciembre ya está preparado para volver a navegar.

Santa Ana en Trafalgar. Retorno a Puerto en Cádiz.

¿Pérdidas humanas? La batalla del Santa Ana en Trafalgar, lamentablemente, acarrea la muerte de 97 tripulantes, además de herir a 141 más. Eso sí, este navío de línea se erige como el primero que consigue parar a los ingleses.

TRISTE FINAL PARA UN GIGANTE DE LA HISTORIA NAVAL ESPAÑOLA Y MUNDIAL

Más allá de la Batalla de Trafalgar, el navío de línea español Santa Ana tiene poca vida más. Empezando porque en 1808, justo al inicio de la Guerra de la Independencia Española, no puede participar en el enfrentamiento y apresamiento de la escuadra gala del almirante Rosily en Cádiz. ¿Por qué? Porque aún está siendo reparado en el arsenal, así que nuevo chasco táctico naval para España.

En agosto de 1812 zarpa hacia La Habana, a la que arriva en noviembre junto al Príncipe de Asturias y al inglés Implacable en un estado lamentable. Sin agua potable ni víveres, sus tripulaciones llegan con un fatal estado de salud. La intención es asegurar estos navíos durante el conflicto bélico contra los franceses pero el coste fue muy caro.

En 1816 el buque de guerra español se va a pique en el arsenal de La Habana por falta de carena. Las labores de mantenimiento del mismo son nulas. Queda localizado en una de las partes del puerto. Como últimos servicios, el Santa Ana se destina a, por lo menos, hacer de pontón y de depósito de marinerías. Como curiosidad, en 1834 aún se podía apreciar al Santa Ana junto al Príncipe de Asturias, ambos hundidos. Prestó más de tres décadas de un relevantísimo servicio para España. El Santa Ana es todo un icono naval.

Plano de Navío de 112 cañones, como el Santa Ana. En la Batalla de Trafalgar lleva 104 cañones y 22 obuses.

MAQUETA EN MADERA DEL NAVÍO DE LÍNEA SANTA ANA A ESCALA 1/84

Reviva con nosotros la Batalla de Trafalgar. Devuelva la vida a este baluarte naval español construyendo la espléndida maqueta en madera del navío de línea español Santa Ana (22905-N). ¡Nueva y limitada edición Trafalgar 1805! ¡Descúbrala en estos dos vídeos!

Leer la primera parte del post…

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Historia Navío Santa Ana (I): El Coloso Pionero de los Buques de Guerra Europeos de Su Clase

Estamos de enhorabuena junto a nuestros amigos modelistas expertos. Ya sabe que hemos fabricado una nueva edición de un famosísimo navío de línea español: la llamada ‘Trafalgar 1805’. Conozcamos, pues, la relevante historia del navío Santa Ana para así tener una mejor perspectiva de lo que fue esta gran embarcación antes de ensamblar su espléndida maqueta en madera a escala 1:84.

Maqueta en Madera para Construir del Navío de Línea Español Santa Ana (22905-N) a escala 1:84 de Artesanía Latina.

HISTORÍA NAVÍO SANTA ANA: DIMENSIONES

El Santa Ana fue un navío de línea español dotado de 112 cañones que formó parte de la gloriosa Armada Española. Eso sí, en la Batalla de Trafalgar estuvo armado con 104 cañones y 32 obuses, pero… ¿Cuáles eran sus medidas? Tenía una eslora de 213,4 pies y una manga de 58 pies, además de un peso total de más de dos toneladas. Para construirlo, se tomaron como ejemplo los planos del ingeniero de la Marina José Romero Fernández de Landa. Este, a su vez, se basó en cómo se creó otro navío de línea: el Purísima Concepción. En este caso, quien dirigiría la construcción del Santa Ana sería Miguel de la Puente, usando las mencionadas directrices, con los ingenieros Sánchez Bort y Tomás Muñoz.

Historia Navío Santa Ana: Grabado del Siglo XIX.

El precioso velero Santa Ana se erigió como uno de los pioneros navíos de tres puentes llamados ‘Meregildos’. De este grupo tan especial de navíos, formaron también parte otros siete que nacieron posteriormente como Príncipe de Asturias, Mejicano, Reina María Luisa, Conde de Regla, Salvador del Mundo, Real Carlos y San Hermenegildo. Todos se construyeron basándose en el Santa Ana por Real Orden de 1786.

HISTORÍA NAVÍO SANTA ANA: CARACTERÍSTICAS

¿Sus características? Unas enormes cubiertas, una gran maniobrabilidad, un fuerte músculo militar gracias a sus numerosísimos cañones y una gran capacidad de resistencia ante los envites del mar y los enemigos. Portaba tres palos con velas cuadradas y dos o tres cubiertas artilladas. ¡Hasta contaba con pararrayos y cadenas de metal! Si caía uno, el sistema canalizaba la descarga eléctrica hasta el mar.

Historia Navío Santa Ana: Acuarela de R. Castex.

La historia del navío de guerra Santa Ana lo muestra como uno de los mejores. Creó una manera novedosa de combatir en aquellos tiempos que sería esencial para la Armada. Los distintos navíos se alineaban uno detrás de otro para crear un frente de artillería que disparaba al mismo tiempo. Aunque el Santa Ana se botaba en 1784, incluso años después aún sufría algunas mejoras.

Historia Navío Santa Ana. Batalla de Trafalgar, Pintura de John Steven Dews.

El Santa Ana y sus hermanos navales se convirtieron en los mejores buques de guerra del continente europeo. Era un ‘monstruo del mar’. ¿Su tripulación? 745 marinos en sus tres cubiertas, como buque de guerra. Cuando estallaba un conflicto, se incrementaba a 1.050. Y, en la Batalla de Trafalgar, se llegaba hasta los 1.102. Eso sí, el más grande de los navíos de línea sería finalmente Nuestra Señora de la Santísima Trinidad, apelado con el nombre de ‘El Escorial de los Mares’.

SINGLADURAS MARÍTIMAS INICIALES DEL NAVÍO DE LÍNEA

La historia del navío Santa Ana navegando comienza en 1785 con el comandante Félix de Tejada al frente para realizar su primer viaje, su primer test. La ruta marítima se iniciaba en El Ferrol y concluía en Cádiz. Se percata de que, aun siendo muy resistente con las peores condiciones de navegación, se deben hacer ciertas mejores de arboladura y estrena el tercer dique de La Carraca un año después.

En julio 1797, el navío de línea Santa Ana empieza a forjar su leyenda. El Almirante Jervis y el Contraalmirante Nelson de la Marina Real Británica intentan asaltar Cádiz. Y ahí es donde dieciséis botes cañoneros se posicionan entre Rota, La Caleta (puerta de Sevilla) y Sancti Petri, y otros quince adicionales en la bocana del puerto. Así, apoyan al buque de guerra y rechazan a los ingleses bajo las órdenes de José de Mazarredo. Eso sí, el bloqueo y la presencia británica se repite más veces.

En febrero de 1798, el Santa Ana retoma su singladura marítima con la escuadra de Mazarredo. Veintidós navíos, cinco fragatas y tres bergantines para perseguir a la flota británica, compuesta por sólo 9 navíos y varias fragatas. Esta se retira hacia San Vicente, mientras que la escuadra española al no darles alcance entra de nuevo en Cádiz el día 13. Jervis aparece cuatro días más tarde con veintidós navíos y seis fragatas para reanudar el bloqueo.

HISTORIA NAVÍO SANTA ANA: PRIMEROS CONTRATIEMPOS

El comandante Baltasar Hidalgo de Cisneros toma el mando en julio de 1799, ayudado por el teniente general Grandallana, haciendo campaña por el Mediterráneo y el Golfo de Cádiz. Sin embargo, anecdóticamente, queda varado al poco de iniciar su trayecto hacia Brest junto a la flota francesa.

¿Qué pasa entonces? Que el buque de guerra español se ve obligado a volver al puerto de la ciudad andaluza para desarmarse y repararse. Un gran contratiempo para España por el que se juzga a Hidalgo de Cisneros en consejo de guerra, aunque es totalmente absuelto al final del proceso. Antes justo de la Batalla de Trafalgar, en la que profundizaremos en el próximo post, la historia del navío Santa Ana se une a la capitanía de Alcalá Galiano entre 1803 y 1804.

Mientras tanto, puede leer más de la Maqueta en Madera del Navío de Línea Santa Ana (22905-N) y puede comprarla en este otro enlace. ¡Asómbrese por su belleza y anímese a construirla!

Maqueta en Madera para Construir del Navío de Línea Español Santa Ana (22905-N) a escala 1:84 de Artesanía Latina.

Leer la segunda parte del post…